El Medio Oriente, región con mayores recursos petrolíferos en el mundo, es la mayor productora y exportadora de hidrocarburos en el mundo, además de la buena calidad de su petróleo y el bajo coste de la explotación. Esto ha motivado la codicia de las potencias occidentales. Los intereses petroleros han formulado la complicada estructura de la geopolítica en esta región y ejercido una influencia sobre el nervio de la política y economía internacionales. En el petróleo circula la sangre de la política internacional y la tempestuosa situación política internacional huele al crudo. Actualmente, el 90 % de la fuerza motriz del transporte mundial depende del petróleo. En las décadas 1980 y 1990, el precio de crudo fue de unos 10 dólares por barril, de 7 a 9 dólares por barril en julio de 1986, e incluso bajó a cinco dólares por barril en el mercado de géneros disponibles. Desde el año 1970 hay actividad petrolera en el territorio Achuar. Las actividades petroleras sólo han dejado a los indígenas: Contaminación de su ambiente y recursos naturales, enfermedades a la población, pérdida de recursos y de su cultura, además de encontrarse intervenido su territorio y amenazada su unidad organizativa. Todo esto sin ninguna indemnización ni compensación.